Un icono gastronómico que traspasa los límites de la gastronomía para convertirse en un emblema cultural y la mejor muestra del equilibrio entre el respeto al medio ambiente y el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales.
El Jamón Ibérico es mucho más que un alimento: es tradición, calidad, trazabilidad, sostenibilidad y, por supuesto, sabor. Dehesas, campos y granjas son el origen de un producto único, vinculado a entornos rurales, a la dieta mediterránea, a sus gentes y a unas prácticas ancestrales que son parte de la tradición de todo un pueblo, para el que el Jamón Ibérico es mucho más que un producto: es un concepto, una manera de entender la vida, una pasión. Una pasión como tendencia foodie, como moda culinaria, como cultura gourmet.